Ensayos de Persuasión



La obra Ensayos de Persuasión que pronto adquirió forma e identidad propia se consideró como una reunión de escritos dirigidos a la audiencia popular. Este libro contribuiría a otorgar a Keynes la notoriedad que ya poseía entre el público, que ya poseía con los economistas.

Este libro es una compilación los ensayos escritos por Keynes hasta 1931 adaptados a la audiencia popular, y a estos les añadió: Los medios para la prosperidad y Como pagar la guerra puesto que tienen el mismo carácter que los incluidos en el volumen.

Según el autor su libro pudo haberse llamado “ensayos de profecía y persuasión”, porque sus profecías tuvieron más éxito que la persuasión, es decir Keynes actúa como un mero espectador de la situación social y económica del siglo XX, en este libro encontramos sus predicciones acerca del futuro y sus soluciones acerca de la situaciones. Hicieron caso omiso a sus soluciones y se cumplieron sus predicciones. Pero deja el nombre de “Ensayos de persuasión” debido a que la función principal era su intento de influir en la opinión pública. El autor admite que su libro fue bastante criticado, mucha gente se levanto contra él y tenía muy pocos a su favor.

La tesis central de su libro es la convicción de que el problema económico ocupará un segundo lugar que Keynes piensa que le corresponde, ya que observamos que en la economía el problema real no es el problema en sí sino que las soluciones que se aplican agravan el problema enormemente como seria la política que se uso en 1939. Una vez que sepamos afrontar los problemas económicos como es debido  pasaran a su papel secundario y ocuparemos los problemas reales del hombre  los problemas cotidianos del día a día. Para ello los problemas económicos tanto anteriores como actuales Keynes afirma que tenemos que actuar de acuerdo con la hipótesis optimista ya que tendera a realizarse ya que al actuar sobre la hipótesis pesimista no encontraremos una solución al problema. Y es en este libro en el que observaremos a través de los acontecimientos de principios de siglo XX la opinión de Keynes y como tuvo razón recordado que cada situación económica es única y que todos los factores son distintos a los que pueda haber anterior o posteriormente por lo que las soluciones para las situaciones económicas a lo largo de la historia han de ser únicas también. 

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