Los paraísos fiscales

Según la Real Academia Española, un paraíso fiscal es un "país o territorio donde la ausencia o parvedad de impuestos y controles financieros aplicables a los extranjeros residentes constituye un eficaz incentivo para traer capitales del exterior".

Los paraísos fiscales destacan por el uso intensivo que le dan las grandes fortunas, ya que en ellos se evaden los impuestos, lo que conlleva una falta de compromiso que propicia infiernos fiscales soportados por los más pobres. Cualquier persona no puede llevar su dinero a un paraíso fiscal, sino que las personas que realizan esta acción poseen cantidades de capital cuantiosas y capitales drenados en negro que buscan refugio allí.

El objetivo de los países que se convierten en paraísos fiscales es atraer el capital a ellos. Esto provoca una falta de compromiso y una descapitalización de la economía, y, como consecuencia de ello, los pobres acaban soportando con mayor intensidad el peso de las crisis.

Para poder llevar a cabo esto, las personas crean sociedades offshore, sociedades mercantiles con residencia en un país considerado paraíso fiscal fundadas por un no residente, que se constituyen a través de abogados y agentes acreditados en una jurisdicción específica. La finalidad de estas sociedades es ahorrar en impuestos, pues, artificiosamente, se hace aparentar que determinadas rentas son generadas en esos lugares, evitando con ello la aplicación de las normas fiscales del país en el que en realidad se generan, por lo general mucho más gravosas.

En España hay una serie de medidas contra los paraísos fiscales, que se han ido incrementando con el paso del tiempo. La última noticia acerca de esto proviene del Ministerio de Hacienda, que recientemente anunció que se tomarían nuevas medidas para luchar contra el fraude fiscal, adelantando que se pretende modificar el Impuesto de Sociedades adaptándolo a las nuevas Directivas de la Unión Europea anti-elusión fiscal.

Cabe destacar que el acto de llevar dinero a un paraíso fiscal no se considera ilegal, aunque lo que si se constituye un delito es la elusión del pago de impuestos.

Entre los sitios que son considerados paraísos fiscales para España se encuentran lugares tan diversos como las Islas Caimán o Gibraltar.

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